Llévelo, llévelo

En esta ocasión le venimos ofertando a Carpy, un hombre sensible y cándido, dulce y bondadoso, muy lejano al estereotipo del macho mexicano, al que ustedes, damas y caballeros, están acostumbrados.

Carpy posee una amplia gama de características positivas y encantos que le permiten cumplir varias funciones sociales: al estar en profundo contacto con su lado femenino puede ser tu mejor amiga, tu paño de lágrimas y tu confidente, pero, también, puede encarnar tu más sucia, perversa y tántrica tentación.

Salir con Carpy es siempre una aventura, nunca sabes a donde te llevará este avispado conductor (probablemente él tampoco sabe o no lo ve bien debido a que es casi ciego), pero podrías terminar, ya sea en las mejores pachifiestas de la ciudad, o en el corralón tras un accidente vial.

Además, si tienes a Carpy en tu casa, ten por seguro que nunca se echará a perder la comida del refrigerador y que podrás gozar la compañía de un frugal compañero de agradable aroma.

No lo piense más damita, caballero, llévese a Carpy a casa y disfrútelo.

viernes, 13 de junio de 2008

Ayer, día del lanzamiento Cuerpy.blogspot fue día de San Antonio, ¿coincidencia?...

Dice la tradición que para que una mujer entrada en años consiga marido debe castigar a San Antonio y ponerlo cabeza abajo hasta encontrar a su príncipe azul. En muchas partes del mundo se tiene la creencia de que el santo puede llevar a las solteras a los brazos del ser, pero para que San Antonio de Padua haga caso de la solicitud de la casadera, ésta debe de traer consigo trece monedas de la misma nominación, para ofrecerlas a una figura de San Antonio colocadas "de cabeza". Posteriormente la mujer en edad de merecer tiene que dar trece vueltas a la figura, encender una vela y rezar una oración, que dice:


"¡Oh! glorioso San Antonio, santo de mujeres, no te estés haciendo pato y consígueme un marido aunque te tardes un rato. Mira que ya no resisto este loco afán de amar, atiende San Antonio mis ruegos que no me quiero quedar.

No te pido un guapo mozo, ni lo quiero con dinero. Sea un feo o andrajoso o hasta un simple ranchero. Tampoco quiero exigirte un flamante diputado, sino un humano cualquiera, sea solo, viudo o divorciado. No me importa que esté picado, que sea cojo o esté ciego, pues si tú así me lo das yo lo acepto desde luego. Escúchame Toño mío, óyeme santo glorioso, consígueme un baboso que se atreva a ser mi esposo".


Luego entonces, Carpy es un candidato ideal, chicas. Nosotras les facilitamos el trabajo para que no tengan que andar incomodando a San Antonio que tan ocupado debe estar.

No hay comentarios: